Acerquémonos todos al altar

Acerquémonos todos al altar
que es la mesa fraterna del amor, pues siempre que comemos de este pan, recordamos la Pascua del Señor (bis).
1.- Los hebreos en medio del desierto comieron el maná:
nosotros, peregrinos de la vida, comemos este pan.
Los primeros cristianos ofrecieron su cuerpo como trigo:
nosotros, acosados por la muerte, bebemos este vino.
2.- Como Cristo hecho pan de cada día se ofrece en el altar,
nosotros, entregados al hermano, comemos este pan.
Como el cuerpo de Cristo es uno solo por todos ofrecido,
nosotros, olvidando divisiones, bebemos este vino.
3.- Como ciegos en busca de la aurora, dolientes tras la paz,
buscando tierra nueva y cielos nuevos, comamos este pan.
Acerquémonos todos los cansados, porque él es nuestro alivio,
y, siempre que el desierto nos agobie, bebamos este vino.

 

Aclama al Señor, tierra entera. Aleluya.

Aclama al Señor, tierra entera. Aleluya.
servid al Señor con alegría. Aleluya.
Entrad en su presencia con víctores. Aleluya.
2.- Sabed que el Señor es Dios: Aleluya.
que El nos hizo y somos suyos. Aleluya.
su pueblo y ovejas de su rebaño. Aleluya.
3.- Entrad por sus puertas con acción de gracias, Aleluya.
por sus atrios con himnos, Aleluya
dándole gracias y bendiciendo su nombre: Aleluya.
4.- El Señor es bueno, Aleluya
su misericordia es eterna, Aleluya
su fidelidad por todas las edades: Aleluya.

 

Acuérdate de Jesucristo

Acuérdate de Jesucristo,
resucitado de entre los muertos.
Él es nuestra salvación, nuestra gloria para siempre.
1.- Si con Él morimos, viviremos con Él.
Si con Él sufrimos, reinaremos con Él.
2.- En Él nuestras penas, en Él nuestro gozo.
En Él la esperanza, en Él nuestro amor.
3.- En Él toda gracia, en Él nuestra paz.
En Él nuestra gloria, en Él la salvación.

 

A Dios den gracias los pueblos

A Dios den gracias los pueblos,
alaben los pueblos a Dios (bis).
1.- Que Dios tenga piedad y nos bendiga, ilumine su rostro entre nosotros:
conozca la tierra tus caminos, las naciones tu salvación.
2.- Que canten de alegría las naciones porque riges el mundo con justicia,
con rectitud riges los pueblos y gobiernas las naciones de la tierra.
3.- La tierra ha dado su fruto, nos bendice el Señor nuestro Dios.
Que Dios nos bendiga, que le teman los confines todos de la tierra.

 

Adóro te devóte

Adóro te devóte, latens Deitas,
quae sub his figúris vere látitas:
tibi se cor meum totum súbiicit,
quia te contémplans totum déficit.

2.- Visus, tactus, gustus in te fállitur;
sed audítu solo tuto créditur.
Credo, quidquid dixit Dei Fílius:
nil hoc verbo Veritátis vérius.

3.- In cruce latébat sola Déitas,
ad hic latet simul et humánitas;
ambo tamen credens atque cónfitens,
peto quod petívit latro páenitens.

4.- Plagas, sicut Thomas, non intúeor;
Deum tamen meum te confíteor.
Fac me tibi semper magis crédere,
in te spem habére, te dilígere.

5.- O memoriále mortis Dómini,
Panis vivus vitam praestans hómini,
praesta meae menti de te vívere.
Et te illi semper dulce sápere.

6.- Pie pelicáne, Iesu Dómine,
me immúndum munda tuo sánguine.
Cuius una stilla salvum fácere
totum mundum quit ab omni scélere.

7.- Iesu, quem velátum nunc aspício,
oro fiat illud quod tam sitio;
ut, te reveláta cernens fácie,
visu sim beátus tuae gloriae. Amen.

 

Alabad al Señor

Alabad al Señor,
sus grandezas cantad;
es el Dios del Amor, es la eterna bondad.
1.- Es Jesús nuestro bien, nuestra eterna salud;
en sus labios la miel, en sus ojos la luz.
2.- De los cielos bajó, se hizo carne mortal;
a los hombres amó, se hizo Pan celestial.
3.- Es camino y es luz para el hombre mortal.
Es Jesús el amor para el alma inmortal.
4.- De los hombres es Rey, de las almas es Dios.
Es Jesús del altar, que en manjar se nos dio.
5.- Es Jesús Buen Pastor, que apacienta su grey;
con amor se nos da y nos muestra su Ley.
6.- Oh maná, buen Jesús que bajaste al altar;
te queremos servir, te queremos amar.

 

Alma mía, recobra tu calma

Alma mía, recobra tu calma,
que el Señor fue bueno contigo;
alma mía, recobra tu calma, que el Señor escucha tu voz.

1.- Amo al Señor porque escucha mi voz suplicante,
porque inclina su oído hacia mí, el día que lo invoco.

2.- Me envolvían redes de muerte, me alcanzaron los lazos del abismo, caí en tristeza y angustia,
invoqué el nombre del Señor: «Señor, salva mi vida».

3.- El Señor es benigno y justo, nuestro Dios es compasivo;
el Señor guarda a los sencillos, estando yo sin fuerzas me salvó.

4.- Arrancó mi alma de la muerte, mis ojos de las lágrimas, mis pies de la caída.
Caminaré en presencia del Señor, en el país de la vida.

 

Altísimo Señor

Altísimo Señor,
que supiste juntar a un tiempo en el altar ser Cordero y Pastor;
confieso con dolor que mal hice en huir de quien por mí quiso morir.
2.- Cordero Celestial, Pan nacido en Belén, si no te como bien me sucederá mal.
Sois todo piedra imán que atrae el corazón de quien os rinde adoración.
3.- Los ángeles al ver tal gloria y majestad, con profunda humildad adoran su poder,
sin ellos merecer la dicha de gozar de tan sacro y dulce manjar.

 

Amante Jesús mío

Amante Jesús mío,
¡oh cuánto te ofendí!; perdona mi extravío y ten piedad de mí, y ten piedad de mí.
¿Quién al mirarte exánime, pendiente de una cruz, por nuestras culpas víctima, expirar, buen Jesús,
de compasión y lástima no siente el pecho herido, habiéndote ofendido con negra ingratitud?

 

Ave de Fátima

Ave de Fátima
Ave, Ave, Ave, María, Ave, Ave, Ave María.
1.- El trece de mayo a Cova de Iría bajó de los cielos la Virgen María.
2.- Cantemos, cantemos con fe y devoción que reine, oh María, tu gran corazón. Ave.
3.- Las glorias, oh Madre, de tu corazón cantemos ahora, después, en Sión.
4.- Que todos muramos cantando al Señor las glorias, oh Madre, de tu corazón.
5.- Los pobres y enfermos levantan su voz, esperan remedio de tu corazón.

 

Ave de Lourdes

Ave de Lourdes
Ave, Ave, Ave, María, Ave, Ave, Ave María.
1.- El Angel que envía el Dios eternal saluda a María con voz celestial.
2.- Del Cielo ha bajado la Madre de Dios, cantemos el Ave de su Concepción.
3.- De gracia eres llena, Virgen sin igual, alivia la pena del pobre mortal.
4.- Oh Virgen María, te sigo yo en pos, y lleva mi alma al reino de Dios.

 

Ave, Maris Stella

1.- Ave, maris stella, Dei Mater alma, atque semper Virgo, felix celi porta.
2.- Sumens illud Ave Gabriélis ore, funda nos in pace, mutans . Evae nomen.
3.- Solve vincla reis, profer lumen caecis, mala nostra pelle, bona cuncta posce.
4.- Monstra te esse matrem, sumat per te precesqui pro nobis riatus tulis esse tuus.
5.- Virgo singuláris, inter omnes mitis, nos culpis solútos mites fac et castos.
6.- Vitam praesta puram, iter para tutum, ut vidéntes Iesum semper collaetémur.
7.- Sit laus Deo Patri, summo Christo decus, Spíritui Sancto honor, tribus unus. Amen.

 

Bajo tu amparo nos acogemos

Bajo tu amparo nos acogemos,
Santa Madre de Dios.
No desoigas la oración de tus hijos necesitados.
Líbranos de todo peligro, oh siempre Virgen gloriosa y bendita.

 

Beberemos la copa de Cristo

Beberemos la copa de Cristo,
en la mesa del Señor. Amén. Aleluya.
1.-Es la nueva alianza en la sangre del Señor. Amén, Aleluya.
Proclamamos su muerte esperando su retorno. Amén, Aleluya.
2.- Es la fiesta de las bodas de Cristo con su Iglesia. Amén, Aleluya.
Dichosos los invitados al banquete de estas bodas. Amén. Aleluya.

 

Bendigamos al Señor

Bendigamos al Señor
que nos une en caridad y nos nutre con su amor en el pan de la unidad. Oh Padre nuestro.

2.- Conservemos la unidad que el Maestro nos mandó;
donde hay guerra que haya paz, donde hay odio que haya amor. Oh Padre nuestro.

3.- El Señor nos ordenó devolver el bien por mal,
ser testigos de su amor, perdonando de verdad. Oh Padre nuestro.

4.- Al que vive en el dolor y al que sufre soledad,
entreguemos nuestro amor y consuelo fraternal. Oh Padre nuestro.

5.- El Señor, que nos llamó a vivir en unidad,
nos congregue con su amor en feliz eternidad. Oh Padre nuestro.

 

Caminaré en presencia del Señor

Caminaré en presencia del Señor (bis)
1.- Amo al Señor porque escucha mi voz suplicante,
porque inclina su oído hacia mí, el día que lo invoco.
2.- Me envolvían redes de muerte, caí en tristeza y en angustia.
Invoqué el nombre del Señor: «Señor, salva mi vida».
3.- El Señor es benigno y justo, nuestro Dios es compasivo.
El Señor guarda a los sencillos, estando yo sin fuerzas me salvó.
4.- Alma mía recobra tu calma, que el Señor fue bueno contigo,
arrancó mi alma de la muerte, mis ojos de las lágrimas, mis pies de la caída.

 

Cantemos al Amor de los amores

Cantemos al Amor de los amores,
cantemos al Señor; Dios está aquí;
venid, adoradores, adoremos a Cristo Redentor.
Gloria a Cristo Jesús, cielos y tierra, bendecid al Señor.
Honor y gloria a Ti, rey de la Gloria.
Amor por siempre a Ti, Dios del Amor.

 

Cantemos al Señor con alegría

Cantemos al Señor con alegría,
cantemos los llamados a su mesa,
él nos une y alimenta con su Cuerpo y con su Sangre, aleluya.

1.- Esta Carne y esta Sangre son el pan vivo del cielo.

2.- Los que comen de este Cuerpo una sola vida tienen.

3.- Este Cuerpo nos reúne en banquete y en amor.

4.- Todos formamos unidos un solo cuerpo con Cristo.

 

Cerca de ti Señor

Cerca de ti Señor,
quiero morar, tu grande y tierno amor, quiero gozar.
Llena mi pobre ser, limpia mi corazón; hazme tu rostro ver en la aflicción (bis).

2.- Pasos inciertos doy, el sol se va; mas, si contigo estoy, no temo ya.
Himnos de gratitud ferviente cantaré y fiel a Ti, Jesús, siempre seré (bis).

3.- Día feliz veré creyendo en Ti, en que yo habitaré cerca de Ti.
Mi voz alabará tu santo nombre allí y mi alma gozará cerca de Ti (bis)

 

Christus vincit

Christus vincit, Christus regnat, Christus, Christus imperat.
1.- Laudate Dominum omnes gentes, laudate eum omnes populi.
2.- Quoniam confirmata est super nos misericordia eius, et veritas Domini manet in aeternum.

 

Como brotes de olivo

Como brotes de olivo en torno a tu mesa, Señor,
así son los hijos de la Iglesia.
1.- El que teme al Señor será feliz; feliz el que sigue su ruta.
2.- Del trabajo de tus manos comerás; a Ti la alegría, el gozo.
3.- Y tu esposa, en el medio de tu hogar, será como viña fecunda.
4.- Como brotes de un olivo reunirás los hijos en torno a tu mesa.
5.- El Señor bendecirá al hombre fiel con esta abundancia de bienes.
6.- A los hijos de tus hijos los verás; la gloria al Señor por los siglos.

 

De rodillas, Señor, ante el sagrario

De rodillas, Señor, ante el sagrario,
que guarda cuanto queda de amor y de unidad.
Venimos con las flores de un deseo, para que nos las cambies en frutos de verdad.
Cristo en todas las almas, y en el mundo la paz (bis).
2.- Como estás, mi Señor, en la custodia igual que la palmera que alegra el arenal,
queremos que en el centro de la vida reine sobre las almas tu ardiente caridad.
Cristo en todas las almas, y en el mundo la paz (bis).

 

Desde lo hondo a Ti grito, Señor;

Desde lo hondo a Ti grito, Señor;
Señor, escucha mi voz; estén tus oídos atentos a la voz de mi súplica.
Mi alma espera en el Señor, mi alma espera en su palabra,
mi alma aguarda al Señor, porque en El está la salvación.

2.- Si llevas cuenta de los delitos, Señor, ¿quién podrá resistir?
Pero de Ti procede el perdón, y así infundes respeto.

3.- Mi alma aguarda al Señor, más que el centinela la aurora.
Aguarde Israel al Señor, como el centinela la aurora.

4.- Porque del Señor viene la misericordia y la redención copiosa;
y El redimirá a Israel de todos sus delitos.

 

Día y noche van tus ángeles

Día y noche van tus ángeles, Señor, conmigo.
Día y noche, pienso que Tú estás en mí.

1.- Si anochece en el camino van tus ángeles, Señor, conmigo.
Si en la noche pierdo el rumbo, pienso que Tú estás en mí.

2.- Si camino entre los hombres, van tus ángeles, Señor, conmigo.
Al servirles cada día, pienso que Tú estás en mí.

3.- Si me encuentro triste y solo, van tus ángeles, Señor, conmigo.
En las luchas de la vida, pienso que Tú estás en mí.

4.- Cuando va muriendo el sol, van tus ángeles, Señor, conmigo.
Al dormir confío en Ti, pienso que Tú estás en mí.

5.- Cuando silba fuerte el viento, van tus ángeles, Señor, conmigo.
En la noche oscura y fría, pienso que Tú estás en mí.

6.- Cuando tenga que morir, van tus ángeles, Señor, conmigo.
Guarda mi alma para ti, pienso que Tú estás en mí.

 

Divina Virgen

Divina Virgen, radiante Estrella,
tus pies venimos a besar.
Recibe madre los corazones que mueren por poderte amar (bis).
1.- Jamás desoye tu pecho amante al que tu nombre invocó.
Oye el murmullo de la plegaria, que somos hijos de tu amor (bis)

 

Donde hay caridad y amor

Donde hay caridad y amor,
allí está el Señor, allí está el Señor.

1.- Una sala y una mesa, una copa, vino y pan, los hermanos compartiendo en amor y en unidad.
Nos reúne la presencia y el recuerdo del Señor, celebramos su memoria y la entrega de su amor.

2.- Invitados a la mesa del banquete del Señor, recordamos su mandato de vivir en el amor.
Comulgamos en el Cuerpo y en la Sangre que él nos da, y también en el hermano, si lo amamos de verdad.

3.- Este pan que da la vida y este cáliz de salud nos reúne a los hermanos en el nombre de Jesús. Anunciamos su memoria, celebramos su pasión, el misterio de su muerte y de su resurrección.

 

Dulce Madre

Dulce Madre,
Virgen pura, Tú eres siempre mi ilusión;
yo te amo con ternura y te doy mi corazón (bis).

2.- Siempre quiero venerarte, quiero siempre a Ti cantar;
oye, Madre, la plegaria que te entono con afán (bis).

 

El Señor es mi luz y mi salvación

El Señor es mi luz y mi salvación,
el Señor es la defensa de mi vida.
Si el Señor es mi luz, ¿a quién temeré, quién me hará temblar?

1.- Una cosa pido al Señor, habitar por siempre en su casa;
gozar de la dulzura del Señor contemplando su templo santo.

2.- No me escondas tu rostro Señor, buscaré todo el día tu rostro;
si mi padre y mi madre me abandonan el Señor me recogerá.

3.- Oh Señor, enséñame el camino, guíame por la senda verdadera;
gozaré de la dicha del Señor en la tierra de la vida.

 

El Señor es mi Pastor

El Señor es mi Pastor, nada me puede faltar.

1.- EI Señor es mi pastor, nada me falta; en praderas de hierba tierna Él me hace reposar;
a las aguas del descanso me guía y mi alma reconforta.

2.- EI me guía por veredas de justicia, por amor de su nombre; aunque pase por valles de tinieblas,
ningún mal temeré; junto a mí tu vara y tu cayado, ellos me confortan.

3.- Tú preparas ante mí una mesa, frente a aquellos que me odian;
unges con aceite mi cabeza, desbordando está mi copa.

4.-Pues el bien y la gracia han de seguirme por los días de mi vida,
y moraré en la casa del Señor a lo largo de mis días.

5.- Gloria a Dios Padre omnipotente y a su Hijo el Señor
y al Espíritu que habita en nuestras almas, por los siglos de los siglos.

 

El Señor hizo en mí maravillas

El Señor hizo en mí maravillas, gloria al Señor.
1.- Engrandece mi alma el Señor, se alegra mi espíritu en Dios mi Salvador.
2.- Se inclinó a la pequeñez de su esclava; desde ahora dichosa me dirán todos los siglos.
3.- Maravillas hizo en mí el Poderoso y Santo es su nombre.
4.- Su bondad por los siglos de los siglos para aquellos que le temen.
5.- Desplegó fortaleza su brazo; dispersó a los soberbios.
6.- Derribó a los potentados de los tronos; encumbró a los pobres.
7.- A los hambrientos llenó de bienes y a los ricos despidió vacíos.
8.- Acogió a Israel su siervo, recordando su bondad.
9.- Según habló a nuestros padres, en favor de Abraham y su linaje para siempre.
10.- Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu, por los siglos de los siglos.

 

Eres más pura que el sol

Eres más pura que el sol,
más hermosa que las perlas que ocultan los mares.
Ella sola entre tantos mortales del pecado de Adán Dios libró.
Salve, salve, cantaban, María, que más pura que tú, sólo Dios.
y en el Cielo una voz repetía: más que tú, sólo Dios, sólo Dios.

2.- Al mirarla entre el ser y la nada contemplando su cuerpo exclamó:
¡desde el seno será Inmaculada si del suyo nacer tengo Yo!

 

Fiesta del banquete

Fiesta del banquete,
mesa del Señor, Pan de Eucaristía, Sangre de redención.

1.- Este Pan que nos das por manjar, es el Pan de unidad y de fraternidad.

2.- Hacia ti vamos hoy a tu altar, tú nos das la ilusión en nuestro caminar.

3.- Escuché su voz en mi caminar, conocí al Señor en la fracción del Pan.

4.- Pan de vida eterna, Cuerpo del Señor, Cáliz de la Alianza, Fuente de salvación.

Guarda mi alma en la paz junto a Ti, Señor.

1.- Tú conoces, Señor, mi corazón, tú conoces todos mis caminos.

2.- EI orgullo no reina sobre mí, ni mis ojos son altaneros.

3.- He guardado mi alma en la paz, sin buscar honores ni grandezas.

 

Gustad y ved qué bueno es el Señor

Gustad y ved qué bueno es el Señor,
dichoso el que se acoge a Él (bis).

1.- Bendigo al Señor en todo momento, su alabanza está siempre en mi boca;
mi alma se gloria en el Señor, que los humildes lo escuchen y se alegren.

2.- Proclamad conmigo la grandeza del Señor, ensalcemos juntos su nombre.
Yo consulté al Señor y me respondió; me libró de todas mis ansias.

3.- Contempladlo y quedaréis radiantes, vuestro rostro no se avergonzará;
si el afligido invoca al Señor, Él lo escucha y lo salva de sus angustias.

4.- Todos sus santos, temed al Señor porque nada les falta a los que le temen;
los ricos empobrecen y pasan hambre; los que buscan al Señor no carecen de nada.

5.- Guarda tu lengua del mal y tus labios de la falsedad;
apártate del mal y obra el bien, busca la paz y corre tras ella.

 

Hacia ti

Hacia ti, morada santa,
hacia ti, tierra del Salvador, peregrinos, caminantes, vamos hacia ti.
1.- Venimos a tu mesa, sellaremos tu pacto, comeremos tu carne, tu sangre nos limpiará.
Reinaremos contigo en tu morada santa, beberemos tu sangre, tu fe nos guiará.
2.- Somos tu pueblo santo que hoy camina unido; tú vas entre nosotros, tu amor nos guiará. Tú eres el camino. Tú eres la esperanza, hermano de los pobres. Amén, aleluya.

 

Hostia pura

Hostia pura,
Hostia santa, Hostia inmaculada
seais por siempre bendita y alabada.

1.- Altísimo Sacramento, seais bendito y alabado
y eternamente adorado, ¡oh soberano Portento!

2.- Al Rey de cielos y tierra el mundo todo alaba y canta,
que en esta Hostia pura y santa como alimento se encierra.

3.- Entonen himnos de amores al Rey eterno sus criaturas;
resuenen en las alturas sus fervorosos loores.

4.- Oh sol que al mundo iluminas, desde ese trono tan humillado,
al pie de tu altar sagrado, tu pueblo amante se inclina.

 

Humilde nazarena

Humilde nazarena, ¡oh María!
Blancura de azucena, ¡oh María!
Salve, Madre Virginal, salve, Reina celestial.
Salve, salve, salve, María.

2.- Lucero de la aurora, ¡oh María!
Consuelo del que llora, ¡oh María!
Dios nació en un portal, floreciendo en tu rosal.
Salve, salve, salve, María.

3.- Tú eres nuestra madre, ¡oh María!
Levantas al que cae, ¡oh María!
Salve, alivio en el dolor, salve, Madre del Amor.
Salve, salve, salve, María.

 

Junto a Ti

Junto a Ti al caer de la tarde,
y cansados de nuestra labor,
te ofrecemos con todos los hombres el trabajo, el descanso, el amor.

2.- Con la noche las sombras nos cercan, y regresa la alondra a su hogar;
nuestro hogar son tus manos ¡oh Padre! y tu amor nuestro nido será.

3.- Cuando al fin nos recoja tu mano para hacemos gozar de tu paz,
reunidos en torno a tu mesa, nos darás la perfecta hermandad.

 

Juntos cantando la alegría de vernos unidos en la fe y el amor

Juntos cantando la alegría de vernos unidos en la fe y el amor,
juntos sintiendo en nuestras vidas la alegre presencia del Señor.

1.- Somos la Iglesia peregrina que Él fundó, somos un pueblo que camina sin cesar.
Entre cansancios y esperanzas hacia Dios, nuestro amigo Jesús nos llevará.

2.- Hay una fe que nos alumbra con su luz, una esperanza que empapó nuestro esperar.
Aunque la noche nos envuelva en su inquietud, nuestro amigo Jesús nos guiará.

3.- Es el Señor, nos acompaña al caminar. Con su ternura a nuestro lado siempre va.
Si los peligros nos acechan por doquier, nuestro amigo Jesús nos salvará.

 

Juntos como hermanos

Juntos como hermanos,
miembros de una Iglesia, vamos caminando al encuentro del Señor.
1- Unidos al rezar, unidos en una canción, viviremos nuestra fe con la ayuda del Señor.
2-La Iglesia en marcha está; a un mundo nuevo vamos ya, donde reinará el amor, donde reinará la paz.
3- Un largo caminar, por el desierto bajo el sol no podemos avanzar sin la ayuda del Señor.

 

Lauda Jerusalem Dominum

Lauda Jerusalem Dominum
lauda Deum tuum Sion;
hosanna, hosanna, hosanna Filio David.
1-Laudate Dominum omnes gentes, laudate eum omnes populi.
2-Quoniam confirmata est super nos misericordia eius, et veritas Domini manet in aeternum.
3-Gloria Patri et Filio et Spiritui sancto sicut erat in principio et nunc et semper et in saecula saeculorum. Amen.

 

Levanto mis ojos

Levanto mis ojos a los montes:
¿de dónde me vendrá el auxilio?
El auxilio me viene del Señor, que hizo el cielo y la tierra (tres veces)

2.- No permitirá que resbale tu pie, tu guardián no duerme;
no duerme ni reposa el guardián de Israel.

3.- El Señor te guarda a su sombra, el Señor está a tu derecha;
de día el sol no te hará daño, ni la luna de noche.

4.- El Señor te guarda de todo mal, el Señor guarda tu alma.
El guarda tus entradas y salidas, ahora y por siempre.

 

Me adelantaré hasta el altar de Dios

Me adelantaré hasta el altar de Dios, el gozo de mi vida.

1.- Dadme, oh Dios, con la luz de la fe el camino que llega hasta Vos.

2.- Confiemos en Dios sin cesar, nuestro Padre, nuestro Salvador.

3.- Gloria a Dios, trino y uno Señor, por los siglos y siglos. Amén.

 

Mi boca te cantará jubilosa

Mi boca te cantará jubilosa,
Tú eres un festín para mí.

1.- Oh Dios, Tú eres mi Dios, yo te busco, mi alma tiene sed de Ti.

2.- Lo mismo que la tierra sin agua, mi ser entero tiende a Ti.

3.- Señor, yo quiero ir a tu templo, por ver tu gloria, tu poder.

4.- Tu Amor vale más que la vida, mis labios cantarán sin fin.

5.- Mis manos se alzarán a tu Nombre, mi vida cantará tu Amor.

6.- De noche viene a mí tu recuerdo y va mi pensamiento a Ti.

7.- Mi alma está aferrada a tu diestra, mi Alcázar eres Tú, Señor.

8.- Debajo de tus alas anido y tengo mi refugio en Ti.

9.- Honor y gloria a Dios, por los siglos, al Padre, al Hijo, al Santo Amor.

 

No podemos caminar

No podemos caminar
con hambre bajo el sol.
Danos siempre el mismo pan: tu Cuerpo y Sangre, Señor.

1.- Comamos todos de este pan, el pan de la unidad. En un cuerpo nos unió el Señor por medio del amor.

2.- Señor, yo tengo sed de ti, sediento estoy de Dios; pero pronto llegaré a ver el rostro del Señor.

3.- Por el desierto el pueblo va cantando su dolor; en la noche brillará tu luz, nos guía la verdad.

 

Oh buen Jesús

Oh buen Jesús yo creo firmemente
que por mi bien estás en el altar.
Que das tu Cuerpo y Sangre juntamente, al alma fiel en celestial manjar (bis).

2.- Indigno soy, confieso avergonzado, de recibir la santa Comunión.
Jesús, que ves mi nada y mi pecado, prepara Tú mi pobre corazón (bis).

3.- Pequé, Señor; ingrato te he ofendido; infiel te fui; confieso mi maldad;
contrito ya, perdón, Señor, Te pido; eres mi Dios, apelo a tu bondad (bis).

4.- Espero en Ti, piadoso Jesús mío. Oigo tu voz que dice: «Ven a Mí».
Porque eres fiel, por eso en Ti confío. Todo, Señor, lo espero hoy de Ti (bis).

5.- Dulce maná y celestial comida. Gozo y salud de quien Te come bien.
Ven sin tardar, mi Dios, mi luz, mi vida. Desciende a mí, hasta mi pecho ven (bis).

 

Oh divino corazón

Oh divino corazón llagado por mi amor,
¿cuándo será que yo viva solamente para Vos? (bis),
¿que yo viva, que yo viva solamente para Vos? ¿que yo viva para Vos, solamente para Vos?
1.- Penetra en nuestro pecho, que el corazón te llama, y enciende en él la llama de tu divino amor;
penetra en nuestro pecho (bis, duo).

 

Oh luz de Dios

Oh luz de Dios,
radiante Sol, que brillas en la cuna.
Envíanos tu resplandor, que alumbre nuestro corazón. Oh luz de Dios…
2.-Feliz portal, mansión de paz, que albergas a Dios Niño.
Envíanos tu paz, Señor, que alegre nuestro corazón. Feliz portal…

Oh luz gozosa

Oh luz gozosa
de la santa gloria del Padre celeste inmortal, santo y feliz Jesucristo.

1.- Al llegar el ocaso del sol, contemplando la luz de la tarde,
cantamos al Padre y al Hijo y al Espíritu de Dios.

2.- Tú eres digno de ser alabado siempre por santas voces.
Hijo de Dios, que nos diste la vida, el mundo entero te glorificará.

 

¡Oh María, Madre mía!

¡Oh María, Madre mía!
¡Oh consuelo del mortal!
Amparadme y guiadme a la patria celestial.

1.- Con el ángel de María, las grandezas celebrad;
inundados de alegría, sus finezas publicad.

2.- Quien a ti ferviente clama halla gloria en el pesar;
pues tu nombre luz derrama, gozo y bálsamo de paz.

3.- Pues te llamo con fe viva, muestra, oh Madre, tu bondad;
a mí vuelve, compasiva, esos ojos de piedad.

4.- Hijo fiel quisiera amarte, y por ti sólo vivir,
y por premio de ensalzarte, ensalzándote morir.

 

Oh Dios, entre tus manos

Oh Dios, entre tus manos,
mis manos abiertas reciben tu pan. Oh Señor, espiga de amor, llena mi corazón.
Y entre tus manos, oh Señor, guárdanos, guárdanos, dinos lo que es amor (bis).

2.- Oh Señor, sendero de amor, mi alma en silencio escucha tu voz.
Oh Señor, Maestro y Pastor, dinos lo que es amor.

3.- Oh Señor, con fe y hermandad mi pueblo celebra la fiesta Pascual.
Oh Señor, en torno a tu altar, sella nuestra amistad.

 

Oh Señor, envía tu Espíritu que renueve la faz de la tierra

Oh Señor, envía tu Espíritu que renueve la faz de la tierra.

1.- Oh Señor, que mi alma te bendiga; oh Dios, Tú eres grande, vestido de esplendor y belleza.

2.- Sobre el agua construyes tus moradas; oh Dios, en las alturas y en alas del viento Tú caminas.

 

Oh Señor yo no soy digno

Oh Señor yo no soy digno
de que entres en mi morada, de que entres en mi morada, de que entres en mi morada
más di una sola palabra, más di una sola palabra y mi alma quedará sana, quedara sana (tres veces).

 

Pange, lingua,

Pange, lingua,
gloriósi córporis mystérium, sanguinísque pretiósi, quem in mundi prétium
fructus ventris generósi Rex effúdit géntium.

2.- Nobis datus, nobis natus ex intácta Vírgine, et in mundo conversátus, sparso verbi sémine,
sui moras incolátus miro clausit órdine.

3.- In suprémae nocte cenae recumbens cum frátribus, observáta lege plene cibis in legálibus,
cibum turbae duodénae se dat suis mánibus.

4.- Verbum caro panem verum verbo carnem éfficit, fitque sanguis Christi merum, et, si sensus déficit,
ad firmándum cor sincérum sola fides súfficit.

5.- Tantum ergo sacraméntum,
venerémur cérnui, et antíquum documéntum nova cedat rítui;
praestet fides suppleméntum sénsuum deféctui.

6.- Genitori Genitóque laus et iubilátio, salus, honor, virtus quoque sit et benedíctio;
procedénti ab utróque compar sit laudátio. Amen.

 

Perdona a tu pueblo

Perdona a tu pueblo, Señor,
perdona a tu pueblo; perdónale, Señor.

1.- No estés eternamente enojado, no estés eternamente enojado; perdónale, Señor.

2.- Por la abertura de tu costado, no estés eternamente enojado; perdónale, Señor.

3.- Por tus profundas llagas crueles, por tus salivas y por tus hieles, perdónale, Señor.

4.- Por las heridas de pies y manos, por los azotes tan inhumanos, perdónale, Señor.

 

Perdón, oh Dios mío

Perdón, oh Dios mío,
perdón e indulgencia, perdón y clemencia, perdón y piedad.

1.- Pequé, ya mi alma su culpa confiesa; mil veces me pesa de tanta maldad.

2.- Por mí en el Calvario tu sangre vertiste, y prendas me diste de amor y humildad.

 

Por siempre yo cantaré tu Nombre

Por siempre yo cantaré tu Nombre, Señor.

1.- Fuente de paz y alegría. Tu Nombre…

2.- Fuerza escondida en la lucha. Por siempre…

3.- Gozo, bondad y promesa. Tu Nombre…

4.- Gloria que anhela mi alma. Por siempre…

5.- Guía, salud, fortaleza. Tu Nombre…

6.- Roca segura en mi vida. Por siempre…

7.- Vida, verdad y camino. Tu Nombre…

8.- Luz verdadera del mundo. Por siempre…

9.- Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo.

 

Pueblo de reyes

Pueblo de reyes,
Asamblea santa, Pueblo sacerdotal, Pueblo de Dios, ¡bendice a tu Señor!

1.- Te cantamos, oh Hijo amado del Padre; te alabamos, eterna Palabra salida de Dios.
Te cantamos, oh Hijo de la Virgen María; te alabamos, oh Cristo, nuestro hermano, nuestro Salvador.

2.- Te cantamos a ti, Esplendor de la gloria; te alabamos, Estrella radiante que anuncias el día.
Te cantamos, oh Luz que iluminas nuestras sombras; te alabamos, Antorcha de la nueva Jerusalén.

3.- Te cantamos, Mesías que anunciaron los profetas; te alabamos, oh Hijo de Abrahán e Hijo de David. Te cantamos, Mesías esperado por los pobres, te alabamos, oh Cristo, nuestro Rey de humilde corazón.

 

Qué alegría, cuando me dijeron

Qué alegría, cuando me dijeron,
vamos a la casa del Señor, ya están pisando nuestros pies, tus umbrales Jerusalén.

1.- Jerusalén está fundada, como ciudad bien compacta.
Allá suben las tribus, las tribus del Señor.

2.- Según la costumbre de Israel a celebrar el nombre del Señor;
en ella están los tribunales de justicia en el palacio de David.

3.- Desead la paz a Jerusalén, vivan seguros los que te aman,
haya paz dentro de tus muros, en tus palacios seguridad.

4.- Por mis hermanos y compañeros vaya decir: «la paz contigo».
Por la casa del Señor, nuestro Dios, te deseo todo bien.

 

Que la lengua humana

Que la lengua humana,
cante este misterio:
la preciosa sangre y el precioso cuerpo.
Quien nació de Virgen, Rey del universo,
por salvar al mundo dio su sangre en precio (bis)

2.- Fue en la última cena, ágape fraterno,
tras comer la Pascua según mandamiento,
con sus propias manos repartió su cuerpo,
lo entregó a los doce para su alimento. (2)

3.- Se entregó a nosotros, se nos dio naciendo
de una casta Virgen; y acabando el tiempo,
tras haber sembrado la Palabra al pueblo,
coronó su obra con prodigio excelso.

4.- La Palabra es carne y hace carne y cuerpo,
con palabra suya, lo que fue pan nuestro.
Hace sangre el vino y, aunque no entendemos,
basta fe, si existe corazón sincero. (2)

5.- Adorad postrados este sacramento.
Cesa el viejo rito, se establece el nuevo.
Dudan los sentidos y el entendimiento:
que la fe lo supla con asentimiento. (2)

6.- Himnos de alabanza, bendición y obsequio;
por igual la gloria y el poder y el reino
al eterno Padre, con el Hijo eterno,
y al divino Espíritu que procede de ellos.

 

Quédate junto a nosotros

Quédate junto a nosotros,
que la tarde está cayendo, pues sin ti a nuestro lado nada hay justo, nada hay bueno.

1.- Caminamos solos por nuestro camino, cuando vemos a la vera un peregrino,
nuestros ojos, ciegos de tanto penar, se nos llenan de vida, se nos llenan de paz.

2.- Buen amigo, quédate a nuestro lado, pues el día ya sin luces se ha quedado;
con nosotros quédate para cenar y comparte mi mesa y comparte mi pan.

3.- Tus palabras fueron la luz de mi espera, y nos diste una fe más verdadera;
al sentarnos junto a ti para cenar, conocimos quién eras al partimos el pan.

 

Quédate con nosotros

Quédate con nosotros,
que la tarde está cayendo. Quédate con nosotros, quédate.

1.- ¿Cómo te encontraremos al declinar el día,
si tu camino no es nuestro camino?
Detente con nosotros, la mesa está servida,
caliente el pan y envejecido el vino.

2.- ¿Cómo sabremos que eres un hombre entre los hombres,
si no compartes nuestra mesa humilde?
Repártenos tu Cuerpo y el gozo irá alejando
la oscuridad que pesa sobre el hombre.

3.- Vimos romper el día sobre tu hermoso rostro,
y al sol abrirse paso por tu frente.
Que el viento de la noche no apague el fuego vivo
que nos dejó tu paso en la mañana.

4.- Arroja en nuestras manos, tendidas en tu busca,
las ascuas encendidas del Espíritu;
y limpia en lo más hondo del corazón del hombre
tu imagen empañada por la culpa.

 

Regina caeli

Regina caeli, laetáre, allelúia.
Quia quem meruísti portáre, allelúia.
Resurréxit sicut dixit, allelúia.
Ora pro nobis Deum, allelúia.

 

Reunidos en el nombre del Señor

Reunidos en el nombre del Señor
que nos ha congregado ante su altar
celebremos el misterio de la fe bajo el signo del amor y la unidad (bis).

1.- Tú, Señor, das sentido a nuestra vida, tu presencia nos ayuda a caminar,
tu Palabra es fuente de agua viva que nosotros sedientos a tu mesa venimos a buscar.

2.- Purifica con tu gracia nuestras manos, ilumina nuestra mente con tu luz.
Que la fe se fortalezca en tu Palabra y tu Cuerpo tomado en alimento nos traiga la salud.

 

Ruega por nosotros, amorosa Madre

Ruega por nosotros, amorosa Madre,
para que tu Hijo no nos desampare.

1.- De tus ojos penden las felicidades; míranos, Señora, no nos desampares.

2.- Bien veo, Señora, madre de mi alma, que por mis pecados lágrimas derramas.

 

Salve, Madre, en la tierra de mis amores

Salve, Madre, en la tierra de mis amores,
te saludan los cantos que alza el amor; Reina de nuestras almas, Flor de las flores, muestra aquí de tu gloria los resplandores, que en el cielo tan sólo te aman mejor.
Virgen santa, Virgen pura, vida, esperanza y dulzura del alma que en Ti confía, Madre de Dios, Madre mía, mientras mi vida alentare, todo mi amor para Ti; mas, si mi amor te olvidare, Madre mía, Madre mía, aunque mi amor te olvidare, Tú no te olvides de mí.

 

Salve regina

Salve regina,
Máter misericórdiae,Víta, dulcédo, spes nóstra, sálve.
Ad te clamámus, éxules, fílii évae. Ad te suspirámus, geméntes et fléntes in hac lacrimárum válle.
Eia ergo, Advocáta nóstra, íllos túos misericórdes óculos ad nos convérte.
Et Jesum, benedíctum frúctum véntris túi, nóbis post hoc exílium osténde.
O clémens, o pía, o dúlcis Vírgo María.

 

Señor Dios nuestro

Señor Dios nuestro,
¡qué admirable es tu nombre en toda la tierra, en toda la tierra!

1.- Cuando contemplo el cielo, obra de tus dedos, la luna y las estrellas que has creado;
¿qué es el hombre para que Te acuerdes de él, el ser humano para darle poder?,

2.- Lo hiciste poco inferior a los ángeles, lo coronaste de gloria y dignidad,
le diste el mando sobre las obras de tus manos, todo lo sometiste bajo sus pies.

3.- Rebaños de ovejas y toros y hasta las bestias del campo,
las aves del cielo, los peces del mar, todo lo sometiste bajo sus pies.

 

Señor, ven a a nuestras almas

Señor, ven a a nuestras almas que por Ti suspiran; ven, Señor. ‘

1.- Como el ciervo que a las fuentes de agua fresca va veloz,
los anhelos de mi alma van en pos de Ti, Señor.

2.- Del Señor, Dios de los cielos, tiene sed mi corazón;
¿cuándo, al fin, podrá este siervo ver tu rostro, gran Señor?

3.- Con canciones de alabanza, con canciones en tu honor,
jubiloso he de acercarme a la mesa del Señor

4.- Los manteles sobre el ara ya derraman resplandor;
vamos todos al banquete, invitados del Señor.

5.- Este pan comamos juntos en fraterna y santa unión,
este pan que ha preparado con sus manos el Señor

6.- Allí el cáliz beberemos que rebose salvación,
mientras tanto el santo nombre cantaremos del Señor.

 

Sí, me levantaré

Sí, me levantaré, volveré junto a mi Padre. ‘

1.- A ti, Señor, elevo mi alma. Tú eres mi Dios y mi Salvador.

2.- Mira mi angustia, mira mi pena, da me la gracia de tu perdón.

3.- Mi corazón busca tu rostro; oye mi voz, Señor, ten piedad.

4.- No pongas fin a tu ternura, haz que me guarde siempre tu amor.

5.- Piedad de mí, oh Dios de ternura; lava mis culpas, oh Salvador.

 

Te adoro, Sagrada Hostia

Te adoro, Sagrada Hostia,
te adoro Sagrada Hostia, pan vivo y alimento de los ángeles (bis).

1.- Bajaste del alto cielo, bajaste a nuestro altar, y en esa blanca Hostia, escondido estás (bis).

2.- Señor, entre tus hijos, aquí quieres morar; oculto tras el velo de este blanco pan (bis).

3.- Tú das la vida al mundo, y a los hombres la paz; Tú eres nuestro alimento, Señor, Dios de bondad (bis).

 

Te conocimos, Señor, al partir el pan

Te conocimos, Señor, al partir el pan;
Tú nos conoces, Señor, al partir el pan (bis)

1.- Andando por el camino te tropezamos, Señor, te hiciste el encontradizo, nos diste conversación;
tenían tus palabras fuerza de vida y amor, ponían esperanza y fuego en el corazón.

2.- Llegando a la encrucijada, tú proseguías, Señor; te dimos nuestra posada, techo, comida y calor;
sentados como amigos a compartir el cenar, allí te conocimos al repartirnos el pan.

3.- Andando por los caminos te tropezamos, Señor, en todos los peregrinos que necesitan amor;
esclavos y oprimidos que buscan la libertad, hambrientos, desvalidos, a quiénes damos el pan.

 

Te damos gracias, Señor, de todo corazón

Te damos gracias, Señor, de todo corazón.
Te damos gracias, Señor, cantamos para Ti.

1.- A tu nombre daremos gracias, por tu amor y tu lealtad, te llamé y me escuchaste, aumentaste el valor en mi alma.

2.- Te alaban los reyes de la tierra, porque oyeron la voz de tu palabra, y en los caminos del Señor van cantando, porque grande es la gloria del Señor.

3.- Si camino en medio de la angustia, me das vida a pesar del enemigo. Tú miras al pobre y al humilde, grandioso es el Señor.

4.- Tiendes tu mano y me salvas, cumplirás tu favor hacia mí, Señor, tu amor es eterno, no abandones la obra de tus manos.

 

Te doy gracias, Señor

Te doy gracias, Señor,
de todo corazón, delante de los ángeles tañeré para ti.

1.- Me postraré hacia tu santuario, daré gracias a tu nombre: por tu misericordia y tu lealtad, porque tu promesa supera a tu fama.

2.- Que te den gracias, Señor, los reyes de la tierra, al escuchar el oráculo de tu boca; canten los caminos del Señor, porque la gloria del Señor es grande.

3.- Cuando camino entre peligros me conservas la vida; Señor, tu misericordia es eterna, no abandones la obra de tus manos..

 

Todos unidos formando un solo cuerpo

Todos unidos formando un solo cuerpo,
un pueblo que en la Pascua nació.

1.- Miembros de Cristo en sangre redimidos, Iglesia peregrina de Dios.
Vive en nosotros la fuerza del Espíritu que el Hijo desde el Padre envió.
El nos empuja, nos guía y alimenta, Iglesia peregrina de Dios.
Somos en la tierra semilla de otro reino, somos testimonio de amor.
Paz para las guerras y luz para las sombras, Iglesia peregrina de Dios. (bis)

2.- Rugen tormentas, y a veces nuestra barca parece que ha perdido el timón.
Miras con miedo, no tienes confianza, Iglesia peregrina de Dios.
Una esperanza nos llena de alegría: presencia que el Señor prometió.
Vamos cantando, El viene con nosotros, Iglesia peregrina de Dios.

3.- Todos nacidos en un solo bautismo, unidos en la misma comunión.
Todos viviendo en una misma casa, Iglesia peregrina de Dios.
Todos prendidos en una misma suerte, ligados a la misma salvación.
Somos un cuerpo, y Cristo es la cabeza, Iglesia peregrina de Dios.

 

Tomad, Virgen pura

Tomad, Virgen pura nuestros corazones;
no los abandones jamás, jamás; no los abandones jamás, jamás.
1.- Mil querubes bellos orlan tu dosel; quiero estar con ellos, Virgen, llévame;
contigo en el cielo, colmado de anhelo, qué feliz seré.

 

Pan de vida

Tú eres, Señor, el Pan de vida
1.- Mi Padre es quien os da verdadero pan del cielo.
2.- Quien come de este pan vivirá eternamente.
3.- Aquel que venga a Mi no padecerá más hambre.
4.- Mi carne es el manjar y mi sangre es la bebida.
5.- El pan que Yo daré ha de ser mi propia carne.
6.- Quien come de mi carne mora en Mi y Yo en él.
7.- Bebed todos de él, que es el cáliz de mi sangre.
8.- Yo soy el pan de vida que ha bajado de los cielos.
9.- Si no coméis mi carne no tendréis vida en vosotros.
10.- Si no bebéis mi sangre no tendréis vida en vosotros.
11.- Quien bebe de mi sangre tiene ya la vida eterna.
12.- Mi cuerpo recibid, entregado por vosotros.

 

Tu palabra me da vida

Tu palabra me da vida,
confío en Ti Señor. Tu palabra es eterna, en ella esperaré.
1.- Dichoso el que con vida intachable, camina en la ley del Señor.
Dichoso el que guardando sus preceptos, lo busca de todo corazón.
2.- Postrada en el polvo está mi alma, devuélvame la vida tu palabra;
mi alma está llena de tristeza; consuélame, Señor, con tus promesas.
4.- Este es mi consuelo en la tristeza: sentir que tu palabra me da vida;
por la noche me acuerdo de tu nombre, recorriendo tu camino dame vida.
5.- Repleta está la tierra de tu gracia, enséñame, Señor tus decretos.
Mi herencia son tus mandatos, alegría de nuestro corazón.

 

Tú, Señor, me llamas

Tú, Señor, me llamas,
Tú, Señor, me dices: «Ven, y sígueme», «ven y sígueme».
Señor, contigo iré, Señor, contigo iré.
1.- Dejaré en la orilla mis redes, cogeré el arado contigo, Señor.
Guardaré mi puesto en tu senda, sembraré tu palabra en mi pueblo, y brotará y crecerá.
2.- Dejaré mi hacienda y mis bienes, donaré a mis hermanos mi tiempo y mi afán;
por mis obras, sabrán que tú vives; con mi esfuerzo, abriré nuevas sendas de unidad y fraternidad.

 

Una espiga dorada por el sol

Una espiga dorada por el sol,
el racimo que corta el viñador,
se convierten ahora en pan y vino de amor, en el cuerpo y la sangre del Señor (bis)
1.- Comulgamos la misma comunión, somos trigo del mismo sembrador.Un molino, la vida nos tritura con dolor, Dios nos hace Eucaristía en el amor.
2.- Como granos que han hecho el mismo pan, como notas que tejen un cantar, como gotas de agua que se funden en el mar, los cristianos un cuerpo formarán.
3.- En la mesa de Dios se sentarán, como hijos su pan comulgarán. Una misma esperanza caminando cantarán. En la vida, como hermanos se amarán.

 

Un mandamiento nuevo nos dio el Señor

Un mandamiento nuevo nos dio el Señor:
que nos amáramos todos como El nos amó (bis).
1.- Acercaos, hermanos todos, que es Dios mismo quien invita.
2.- Dios perdona nuestras culpas, a su mesa nos invita.
3.- El que no ama a sus hermanos no se acerque a este convite.
4.- Perdonemos al hermano, como El mismo nos perdona.
5.- De su Cuerpo y de su Sangre se hace reo quien no ama.
6.- Quien te come y no te ama, a sí mismo se condena.
7.- Lo que hagamos al hermano, a Dios mismo se lo hacemos.
8.- Quien no ama a sus hermanos miente si a Dios dice que ama.
9.- La señal de los cristianos es amarse como hermanos.

 

Un solo Señor

Un solo Señor,
una sola fe, un solo bautismo, un solo Dios y Padre.
1.- Llamados a guardar la unidad del Espíritu, por el vínculo de la paz, cantamos y proclamamos.
2.- Llamados a formar un solo Cuerpo, en un mismo Espíritu, cantamos y proclamamos.
3.- Llamados a compartir, una misma esperanza en Cristo, cantamos y proclamamos.

 

Véante mis ojos

Véante mis ojos
Véante mis ojos, dulce Jesús bueno;
véante mis ojos, muérame yo luego.
Vea quien quisiere rosas y jazmines,
que, si yo te viere, veré mil jardines;
flor de serafines, Jesús Nazareno,
véante mis ojos, muérame yo luego.
No quiero contento, mi Jesús ausente,
pues todo es tormento a quien esto siente;
sólo me sustente tu amor y deseo,
véante mis ojos, muérame yo luego.
Gloria, gloria al Padre, gloria, gloria al Hijo,
gloria para siempre igual al Espíritu.
Gloria de la tierra suba hasta los cielos.
Véante mis ojos, muérame yo luego. Amén.

 

Veni, creátor Spíritus

Veni, creátor Spíritus,
mentes tuórum vísita,
imple superna gratia quae tu creásti, péctora.

2.- Qui díceris Paráclitus, donum Dei altíssimi,
fons vivus, ignis, cáritas et spiritális únctio.

3.- Tu septifórmis múnere, dextrae Dei tu dígitus,
tu rite promíssum Patris, sermóne ditans gúttura.

4.- Accénde lumen sénsibus, infúnde amórem córdibus,
infírma nostri córporis, virtúte firmans pérpeti.

5.- Hostem repéllas lóngius, pacémque dones prótinus;
ductóre sic te praevio, vitémus omne nóxium.

6.- Per te sciámus da Patrem, noscámus atque Fílium,
te utriúsque Spíritum, credámus omni témpore. Amen.

 

Victoria, tu reinarás

Victoria, tu reinarás, oh Cruz, tu nos salvarás.
1.- El Verbo en Ti clavado, muriendo nos rescató; de Ti, madero santo, nos viene la Redención.
2.- Extiende por el mundo, tu reino de salvación, oh Cruz, fecunda fuente de vida y bendición.
3.- Impere sobre el odio tu reino de caridad, alcance las naciones el gozo de la unidad.
4.- La gloria por los siglos a Cristo libertador. Su Cruz nos lleve al Cielo, la tierra de promisión.

 

Vienen con alegría

Vienen con alegría, Señor,
cantando vienen con alegría, Señor, los que caminan por la vida, Señor, sembrando tu paz y amor (bis).

1.- Vienen trayendo la esperanza a un mundo cargado de ansiedad,
a un mundo que busca y que no alcanza caminos de amor y de amistad.

2.- Vienen trayendo entre sus manos, esfuerzos de hermanos por la paz,
deseos de un mundo más humano, que nacen del bien y la verdad.

 

Te Deum

Te Deum,
A ti, oh Dios, te alabamos
a ti, Señor, te reconocemos.
A ti, eterno Padre,
te venera toda la creación.
Los ángeles todos, los cielos
y todas las potestades te honran.
Los querubines y serafines
te cantan sin cesar:
Santo, Santo, Santo es el Señor,
Dios del universo.
Los cielos y la tierra
están llenos de la majestad de tu gloria.
A ti te ensalza
el glorioso coro de los apóstoles,
la multitud admirable de los profetas,
el blanco ejército de los mártires.
A ti la Iglesia santa
extendida por toda la tierra,
te proclama:
Padre de inmensa majestad,
Hijo único y verdadero, digno de adoración,
Espíritu Santo, Defensor.
Tú eres el Rey de la gloria, Cristo.
Tú eres el Hijo único del Padre.
Tú, para librar al hombre,
aceptaste la condición humana
sin desdeñar el seno de la Virgen.
Tú, rotas las cadenas de la muerte,
abriste a los creyentes el reino del cielo.
Tú te sientas a la derecha de Dios
en la gloria del Padre.
Creemos que un día
has de venir como juez.
Te rogamos, pues,
que vengas en ayuda de tus siervos,
a quienes redimiste con tu preciosa sangre.
Haz que en la gloria eterna
nos asociemos a tus santos.
Salva a tu pueblo, Señor,
y bendice tu heredad.
Sé su pastor
y ensálzalo eternamente.
Día tras día te bendecimos
y alabamos tu nombre por siempre,
por eternidad de eternidades.
Dígnate, Señor, en este día
guardarnos del pecado.
Ten piedad de nosotros, Señor,
ten piedad de nosotros.
Que tu misericordia, Señor,
venga sobre nosotros,
como lo esperamos de ti.
En ti, Señor, confié,
no me veré defraudado para siempre.